“La sociedad Tipp-Ex”


(Del ser cuantitativo al ser cualitativo de la sociedad conectada…)

Esta semana la he estado dedicando en mis tiempos libres a investigar, escribir borradores y reflexionar sobre la relación “sociedad y personalidad” en la sociedad conectada. Es un tema que considero controvertido y esencial, desde su definición como objeto tradicional del cambio social y de investigación; por la afinidad con otras ciencias especulativas que se adjudican desde hace décadas la propiedad sobre la descripción del cambio social. Antropología social, filosofía, sociología, psicología, economía política y ciencia y tecnología… Es amplio el prontuario de especulaciones y especuladores, unos más que otros profundizan en la adivinación, y unos más que otros en la mera descripción fenomenológica del cambio.

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El oficio de Casandra se ha instalado en cada una de ellas… El don de la profecía, el don de Casandra no ha cesado en quienes pretendemos más que describir el cambio social, pretendemos adelantarnos al mismo, a su predicción. (…) De esto y de aquello, van estas reflexiones para este Blog…!!!

…Vivimos instalados en la mayor cruzada cainita conocida por la humanidad occidental. Constituida en formato lobbies o grupos de poder y presión: freak, fanáticos, extraños, extravagantes, estrafalarios, ambiguos e intolerantes, integristas y antisistema. Es parte de “La sociedad Tipp-Ex” Una generación nativa del mundo globalizado, con una percepción reduccionista y mediática de la sociedad como objeto reconfigurable al alcance de cualquiera, producto de la sociedad conectada. ¡Claro está! La sociedad reducida a plataforma a objeto personal, a drivers, a smartphone. La sociedad transformers”, maleable, custom “customize”, editable y observable por todos. ¡Linkable!

Hablamos de seres con conciencia de prosumidores, con la percepción divina de omnipresencia, de ubicuidad y reservorio de la moral y el bienestar social, poseedores de un destino y un mensaje… La percepción integrista de un mundo rectificable al alcance, sobre el cual reescribir a nuestra imagen y semejanza la humanidad. ¡El don del creador instalado! Es la cultura del predicador desnaturalizado, sin líderes; el evangelizador, el zaratustra del siglo XXI horizontal, el vigilante de la playa, con un pincel de corrector de Tipp-Ex. (…)

Es una conciencia anárquica y light, ambigua, reduccionista de la realidad, prístina y encriptado en el mesianismo decimonónico. Pero eso sí, muy funcional para el sostenimiento de la superconciencia horizontal y binaria de la nueva humanidad digital. Hemos pasado de ser una sociedad escrita a una sociedad escribible. De seres cuantitativos unidimensionales, a seres cualitativos horizontales… De ideas sin movimientos, a movimientos sin ideas… ¡No me caso con el Tipp-Ex, ni con el Tippeador de sociedades!

La capacidad instalada de falsa ilusión, en los militantes de la sociedad Tipp-Ex, es directamente proporcional al crecimiento de la masa conectada. La creencia en la extrapolación del bienestar que sufrimos, (disfrutamos) en las redes sociales, hacia el mundo real. De lo virtual a lo real, es algo más que una fuga de bits al mundo real. Es una sensación de placebo y un orgasmo, una sensación nunca vivida por la humanidad de los homínidos superiores. El choque entre modelos, se traduce como sociedad indignada. Cuando lo virtual, se convierte en nuevo avatar, cuando lo virtual supera en horas al mundo real, surge la sociedad en forma de indignación. Un tipo de realidad entra en conflicto con la otra, generando malestar, y un nuevo estado de conciencia horizontal. ¡Una forma evolucionada de antiglobalización! Nacida de los bits. ¡Surge una nueva militancia! Y una cyberorganización de la humanidad conectada.

Dichos roles eran reservorios exclusivos, estuarios de los partidos políticos y de las elites intelectuales, políticas y económicas de la sociedad vertical. La ruptura con la continuidad histórica de la humanidad tal cual la conocíamos y la percibíamos. Es una revolución en frio y silenciosa. Tendrá sus consecuencias, en términos de adaptabilidad radical. La ruptura epistemológica con la dependencia de un mundo dividido en productores, consumidores y meros espectadores, llamadas audiencias. Ya está dejando su impronta, la superconciencia horizontal y binaria. Una nueva evolución de la inteligencia humana, después de la revolución del lenguaje en los homínidos.

Lo virtual, configura un mundo de nuevas realidades y avatares, un muevo modo de producción emotivo ‘awesome’. Así como una nueva dependencia de relaciones universales horizontales. Lo político, lo jurídico, lo moral, y la propiedad, cobran una nueva idea y dimensión del orden de las cosas. “El ser social, ya no condiciona la conciencia social de los individuos”. El mundo material, como reproducción del orden social, es decir, la estructura material ya no condiciona el mundo de la superestructura. El orden imperante como justificativo del mundo, ha volado por los aires. La sociedad virtual desmonta y dinamita el orden como mundo vertical y lo desmitifica como razón, como personalidad social del individuo, sujeto del ser social. Lo virtual como motor de la historia digital. (…)

El materialismo histórico, pareciera que ya no encontrara, al sujeto histórico. Un siglo de predica y dogma de dominio marxista en las ciencias sociales esta por expirar, por cumplir sus plazos. Estamos ante una nueva fenomenología del conocimiento, aun por describir. Quizás Herbert Marcuse, fue quien nos acercó más a una descripción objetiva del cambio social. En términos de sociedad y personalidad. A mi entender, Para Marcuse, la dialéctica se puede dar de formas inversas. Puede darse en ambos sentidos, tanto desde el sujeto dominado, como del lado del ser social como dominador material, como racinalidad tecnológica.

“…No sólo es racional adaptarse sino razonable y conveniente porque no hay escapatoria personal. No hay lugar para la autonomía “y las diversas funciones de la razón convergen en el mantenimiento incondicional del aparato” (Herbert Marcuse).

¿Cómo llegó a constituirse esta racionalidad tecnológica en el pasado, en sistema de dominio? … Según Marcuse la sociedad industrial avanzada ha quedado integrada en ellas, como todas las dimensiones de la existencia humana en una sola. Para Marcuse: El individuo había sido anulado por la sociedad… “la sociedad unidimensional habría integrado todos los opuestos… habría eliminado toda oposición radical aislándola en sus filas. Para preservar el statu quo…

Aunque para Marcuse, el “poder de la maquina” es sólo poder humano almacenado. El hombre perteneciente a esta sociedad, es un hombre unidimensional, es un ser cuantitativo cuya meta es el consumo, cuyas necesidades están falseadas por la sociedad vertical… Para conseguir eliminar esta “personalidad” como miseria de este devenir. Sería preciso denunciar la irracionalidad de esta civilización vertical, de este sujeto histórico, como personalidad alienada y alienante, como sociedad y personalidad. (…)

La sociedad conectada, como nueva personalidad dominante, ha roto con el viejo modelo de personalidad vertical, del mundo almacenado como sociedad unidimensional, como falsa realidad. La irracionalidad de su irracionalidad, el ciclo de este devenir como miseria, encuentra resistencia en la sociedad horizontal, la sociedad conectada. La sociedad virtual, como negación del hombre unidimensional integrado en un modelo de personalidad cuyas metas y miserias son el consumo y la pasividad. ¡Seres en sí, y no para sí…!

“Si el problema no es la técnica, sino el sistema que ha universalizado su lógica, entonces la salida no es oponerse al progreso técnico, sino a los intereses que subyacen a ese progreso, que en el capitalismo como “sociedad vertical”, se reduce a la acumulación de capital. El interés principal no es el progreso de los seres humanos en libertad y felicidad, sino el progreso en la dominación…” (H. Marcuse)

La sociedad Tipp-Ex como afición, “get a hobby” como estilo de vida digital en las redes sociales y en los blogs son las partes más visibles de un estado protosocial en eclosión. La disgregación del hombre cuantitativo, del hombre unidimensional mracusiano, producto de la racionalidad tecnológica. Alcanza su madurez racional, como miseria de la historia. La sociedad horizontal es un estadio superior de la historia vertical o quizás el principio del final de dicha historia. La sociedad del individuo en red, desmonta y denuncia como hobby, como sociedad Tipp-EX a la unidimensionalidad del hombre. Es el triunfo del individuo a la racionalidad de la humanidad vertical. Hemos pasado de las ideas sin movimiento al movimiento sin ideas. ¡Get a hobby!

Parte (I)

1 Comments on ““La sociedad Tipp-Ex””

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